Es solo una ilusión óptica lo que me proporcionan, sobre todo si partimos de que todo en la vida es una construcción. La sociedad medieval que aún deja rastros y todavía me da arcadas, ganas de vomitar cuando se aparece el general sin uniforme, que esta más duro que una mesa, me da mucho mal estomago cuando el se presenta en mi mundo construido a base de las grandes empresas transnacionales y el capitalismo puro.
De hecho yo me reconozco como una cruel victima de la época en que vivimos, hijo del patilludo, me gusta decir. Neoliberalismo en mis calzones, en mis venas corriendo en la sangre, junto al calor, la sombra y un rico tere aledaño a tres muertos por desnutrición a unos metros de mi casa mientras todos juntos miramos a las odaliscas en lo de la vieja chota. ¡Que linda Ferrari señor!, ese rojo debió haber sido sacado del mismo infierno en que se traman sus maldades más maquiavélicas. Señor tengo distintos traumas que usted más la moral de la iglesia cristiana católica y alguna que otra niñera psicópata, sembraron en mi ayer.
Voy entrando al reino, me adentro a lo más alejado de todo en la esfera, y en esa región de “Muy, muy lejano” todo puede pasar, todo es posible, por ejemplo al entrar bien adelante se presenta el, con su calva importante, EL, el rey, el señor Feudal, que hace décadas esta al mando de sus vasallos sumisos. Que pretende quedarse muchos años más, quién sabe si hasta el 2015, quién sabe si más.
Los perros abren grande la boca a ver si atrapan un bocado que su verdugo corta para ellos, por lastima. Por lastima, la misma lastima del Jesús doblado en sangre, del Jesús tan quieto, apacible, símbolo de toda la ingenuidad de una civilización entera que es manipulada a partir de el. De Jesús, de Piscis, de los dos pececitos juntos, y su padre el sol a quién en verdad se adora, de fondo. Puede que en verdad existió este tipo, (No lo tienen sin el tipito dijo una amiga al ver un rosario, en Lujan) puede que fue una cosa así como el “primer” comunista, onda el CHE, de esa época, un mártir. Pero después de el se desprenden un montón de construcciones, un montón de creencias, de cosas que hicieron pedazos la felicidad, la libertad, la realidad, no me mal interpreten, Jesús no hizo nada malo, es más todo lo contrario, pero la forma en que es utilizado su nombre por los de jerarquía y masculinos, esa es la razón de destrucción, de desprecio a la mujer y a la verdad. De niño recuerdo que pensaba, “qué complicados que son todos estos, jodidos”, al escuchar al cura local dando una misa los domingos de verano, en que la iglesia era el mismo infierno. Mucho calor.
Lo que si que acá el único feliz es el Señor Feudal, los Feudales, y sus seguidores que lo ayudan a administrar a los vasallos, a los esclavos, inferiores, marginados, olvidados, pequeños diablos desvalidos. Esa vez de la sombra negra que flotaba no me asusta tanto como la muerte de hambre de miles de personas en el mundo, como las enfermedades, como la falta de agua, la discriminación, la guerra. Toda preocupación al lado de eso queda opacada. Pero es que estamos tan cómodos en nuestro capitalismo.
Es solo una construcción, somos todo lo que imaginamos que somos, somos las palabras que describen lo que somos, es como dice Galeano, es la uva que esta hecha del vino. Cada tanto me deslumbro con una ilusión óptica que me desborda, y hace que me sienta débil, m sienta miserable, pero trato de no pensar, de no sentir, total todo es una construcción.
Voy a malograr una paja al señor feudal, que le guste un poquito eso sí, por unos verdes o unos lilas, para alimentar a mi familia, para alimentar mi ambición, mi materialismo puro, si total nos educan para el trabajo, para el dinero, para cobrar y comprar y pagar, y así la cadena se retroalimenta, es un circulo vicioso que tiene noches y noches, miles de millones inmersos en el, en la paja, en malograr y en la seguridad absoluta del egoísmo puro.
