La Desobediencia del Cuerpo

La supresión de los cuerpos apretados, incorrectos, conectados,
 que quieren volver a ser uno solo.
Malditas hormonas, maldita soledad de los cuerpos libres,
sin pudor, sin miedos.
Ellos son un pecado para los ojos del puritano, del reprimido,
del verdugo.
¡Temer de los cuerpos libres!
Que aman una sola noche y después se olvidan, 
tienen cosas más importantes que seguir la norma, que cumplirla 
y obedecerla.
MI CUERPO NO SE AJUSTA A TUS NORMAS 
Es como quiere ser.
Es un collage plagado de historias, 
de marcas, 
de días, de alegrías, cicatrices
Es el sueño de alguien más y el desagrado de otrxs cuantxs. 
Cuerpos tensos, arbitrarios, de época,    
pálidos, formados,
de marketing, entumecidos, 
me aburren, me irritan, 
¡Quiero cuerpos deformes!
rebeldes, húmedos, deseados, 
de colores y perforados. 
¡Cuerpos sobre cuerpos,
a la salud de los hipócritas!

No puedo pensar con el corazón ni sentir con el cerebro

  No quería llegar a la estación, esas viejas olían a whisky, no me importaba yo quería seguir parado ahí,sabía lo que venía después, y no podía parar las cosas. Ella te tomaba de la mano, yo trataba de mirar el semáforo, había semáforo para ciegos, te expliqué como funcionaba. 

Debía elegir entre la ninfa Diana, tirada entre cadáveres de animales y flechas, entre ese paisaje de belleza y muerte, debía leer los nombres y tratar de recordar algo, no recuerdo ningún nombre. No había comido nada, el viaje me tenía sin cuidado, solo quería irme a vos. Que me importa más, si cuando me mirabas así yo sentía que valía la pena. 

 Guardaba en mi billetera el carnet del centenario de obras sanitarias de la Nación(maldita), de cuando hicimos con los chicos la visita guiada. Nos regalaron uno casi al final del recorrido por el Palacio de agua, ese lugar si que habrá costado millones, a la deuda externa, seguro. El carnet lo pensé para vos, para regalarte, era una pavada pero para mí era una forma de que sepas que yo quería que estés ahí, sentí que te hubiera gustado. . El chocolate, no tenía chocolate aunque tanto  te gustan, lo pensé antes de salir en la mañana, debía comprarlo en el camino pero no lo hice, iba muy rápido. Al final no pude darte nada, ni el carnet ni los chocolates, ni el abrazo, a penas fue un beso. El beso más fugitivo del mundo. 

Volvería de nuevo a hacer ese recorrido, volvería sin dudarlo (mentira). Volvería a caer en la noche, volvería a tomar ese vodka, volvería a caminar por calle corrientes, volvería a entrar a ese departamento de desconocidos y encontrarte, volvería a ignorarte, volvería a besarte y no parar. Al parecer todo ese ritual lo valió, de esas danzas que uno no espera nada, bailar así y que no importe nada, yo no te esperaba.

Pero sé de ese corazón, sé como late con fuerza, sé que es bueno, tierno, blando. Se parece al mío, cuando me recuesto en tu pecho y lo escucho latir, lo sé.. Podría quedarme escuchando así por horas, eso sé, también sé que podría quedarme parado viajando por horas mientras toco tu pelo, te molesto con los dedos y te vuelvo a mirar mientras no me ves.

Pero no tardo en despertarme, de volver a la realidad y darme cuenta que no estoy viviendo mi vida, sino la de alguien más, que ese que sintió una pizca mínima de un afecto que se podía endurecer no era yo, de los mundos no compatibles no puedo dejar mi razón, no puedo dejar que miles de cosas que afectan mi contexto no me separen, me aparten, y vuelvo a al rincón de donde tomaste mi mano, vuelvo allí y feliz sigo mi camino, de saber que seguí mi linea.

Esa es tu vida, ¿será la mía también?, aunque tenga un pensamiento distinto, aún así aprecie cosas que vos desprecias, o desprecie lo que vos aprecias, sí el arte es de todxs pero me cuesta tanto separar algunas cosas, me cuesta tanto no pararme a pensar, de pronto ver tanto católico retractado me dio mal estomago. 

Noches como hoy

En noches como hoy, los cuentos me vienen como fantasmas, los cuentos que contaba mi abuela y me hablaban de veranos esperando en la vereda, de remeras blancas y bermudas a rayas, de siestas de calor a la espera al final del camino. Besos de balcón, regalos y que no importen los vecinos, tardes en colchón en el piso con el turbo a todo lo que da, y más besos.
En noches como hoy me acuesto y me duermo profundo, aparecen los sueños, malditos estos la mañana siguiente, me traen cosas que yo las creí enterradas, me trae el pasado que sigue intacto y que no quiere olvidar, no quiere olvidar esos instantes que yo ni recuerdo.
En noches como hoy los vinos descorchados se vuelven a cargar, tengo tus brazos en mi espalda y bailamos de felicidad. Las sonrisas son tesoros que hoy ya ni habitan, que son ausentes. Mirar el cielo y verlo caer y que no quede más que tú silencio, no quede más que tu cara con mis ojos abiertos, no quede más que tu pansa.
En noches como hoy, estoy en la cocina aún, pico las cebollas, agrego unas cosas raras que compramos del supermercado, se llaman palitos de mar o algo así, pongo a hervir los fideos, vos me traes mates, y seguís estudiando, yo mientras escucho alguna canción, escucho a Liliana, escucho a pansy división, y otros más de Chakira.

Gracias!

 Aún así en caída libre, me sale escuchar esta canción 
y recordar cosas, una de ellas es la de darte las gracias
tantos años después, después de todo, por los años 
tan lindos que compartimos juntos. Me haces mucha falta,

                                                       aunque ya no existís.