De mis cartas de amor a Marta!

¿Qué te paso Marta? Marta mira lo que han hecho con vos, o mejor dicho, ¿qué hiciste de vos Marta? Yo no puedo creer, hay un lapso en el que la retrospectiva te comió, ¿o vos te comiste a la retrospectiva?, Marta amorosa yo te dije que la depresión te hacía comer, aunque debo confesar que en un tiempo no muy lejano yo comía mucho también y vomitaba, me venían esos males que me revolvían las entrañas, como esa vez que me contaste lo de Roberta, que casi  vomito el balcón del mal gusto, ¡hay que tener estomago he! Hablando de Roberta, me acuerdo sí, no es que la registre demasiado, es un ánima más, pero si sé que nos burlábamos de Roberta, pobrecita, me acuerdo que decíamos que era muy patética, y sus relatos de amor que nos daban arcadas y nos reíamos, ¡que tiempos aquellos Martita! Eras una nena mala a la que le gustaba masturbarse mirando mis fotos vintage, nena mala a la que le gustaba que le quemen las nachas con cera de vela caliente, nena mala era la de antes, ahora sólo te quedo un dejo de espanto en las facciones, y mira que yo tengo las mías bien marcadas por el tiempo, pero Marta a vos te choco el Roca, trayecto La Plata-Constitución. Y bueno qué se puede esperar de una burguesa, yo no quiero ser bardera, después me tratan de mala cuando lo único que digo es la verdad, soy sincera, ahora entiendo que no encajaba entre nos Martu, que soy clasista y popular, mientras yo bailaba la cumbia socialista a vos te pegaba duro el rock internacional o esas melodías de intelectualoidas que te gustaba ingerir. Mientras yo tomaba birra y fumaba faso con las pibas en la plaza, vos ibas a un barcito del centro a tomar café con tus amigas, mientras yo trataba de acomodar mi sintáctica y semántica  según nos mandan las instituciones, vos me leías Borges y estudiabas francés. Siempre tan fina,  tan Marta, tan estructurada, tan recta, que aunque querías dar incorrecta dabas correcta en esa supuesta "rebelión", tan perfecta, tan de primer mundo. 
Bueno Marta, mejor me voy yendo por un rato, como consejo de "buena amiga", yo sé que vos sabes que soy muy buena y  lo pensas todo el tiempo, y que nunca dirías o darías a entender lo contrario, vos siempre fuiste muy frontal, es una de tus mayores "virtudes", tener ovarios para enfrentar las cosas, ¡claro que sí! Marta enfrenta todo, nunca necesita de nadie, ella es bien machita, nunca dependió de nadie, nunca uso a nadie, ni para salir  del hoyo en el que se había metido, ni creyó en la de "un clavo saca otro", bueno me fui por las ramas, son las pastillas esas, y el combo que me armo con alcohol, perdón. Lo que decía era mi consejo: deja de querer ser la abeja reina del panal y si sos tan buena, a las que están por debajo de tú colmena dale tus migajas, a las que quedamos aplastadas por la vida, el sistema o lo que sea, no nos enjuicies, deja de lados tus conceptos de mujer de la alta sociedad y visualiza que lo binario ya fue, eso de lo... qué está bien o mal, o de quién es bueno o malo, todo es según con el cristal con el que se mire Martita, no peques de vanidosa vos que sos tan católica, no vaya a ser que el cristal explote y se te clave en los ojos. 
Con mucho amor y cariño, siempre tuya:  La Zurda y Trotska Juana Violencia Rouco Buela.